Las higueras crecen espontáneamente en terrenos rocosos e incluso en
muros, donde pocas plantas encuentran oportunidad. El desarrollo de sus
raíces es temido por mover los suelos donde están situadas. La higuera
produce un
látex irritante. Algunas higueras, llamadas breveras, son
bíferas
o reflorecientes, porque producen dos cosechas al año, la primera, que
es de brevas, a principios del verano, y la segunda, de higos, sobre
finales del estío. Además de como fruto fresco de temporada, los higos se han consumido
tradicionalmente tras someterse a la técnica del secado, esta ha sido la
manera más común de conservar la fruta. La fruta "seca" o "pasada", y
en especial los
higos,
era un alimento especialmente valorado. El proceso permitía dilatar su
consumo en el tiempo y cubrir momentos en los cuales la escasez de
alimento era notoria. Sus hojas han sido usadas en la alimentación animal. La variedad de Esmirna requiere polinización por la avispa del higo y cabrahigos para desarrollar las cosecha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario